Cabecero de cama. ¿Cómo escogerlo?

Los cabeceros de cama son un elemento fundamental en los dormitorios, ya que ayudan a decorar y destacar la pieza más importante de esta habitación: la cama. Escoger un buen cabecero para la cama, esa pieza de mueble con tanto protagonismo en el dormitorio, es importante. A lo largo de los años, los diseños y estilos de cabeceros han ido cambiando, fieles a las tendencias del momento. El abanico de posibilidades a la hora de escoger el cabecero adecuado es muy amplio y en este post te ayudaremos.

Cabeceros de obra

Los cabeceros de obra son aquellos que se integran a la pared, dándonos la posibilidad de cambiarlo y añadirle nuevas funcionalidades. Se trata de una pieza que puede estar hecha de cualquier material que nos guste: madera, ladrillo, hormigón, etc. y que podemos decorar o revestir con otros materiales para conseguir un estilo particular. Por lo tanto, aunque esta pieza es inamovible y se incorpora a la pared, es una pieza muy versátil, ya que podemos customizarla a nuestro gusto para conseguir el estilo como queramos. Además, es un tipo de cabecero al que se le pueden añadir muchas otras funcionalidades, como distintos cajones para almacenar objetos, una iluminación propia, muebles auxiliares, accesorios, etc. El único inconveniente es que es más difícil de quitar.

Cabeceros de madera

Los cabeceros de madera son un mueble que aporta una gran calidez a la habitación. La madera es un material perfecto para un hogar y además es un material muy versátil. Podemos optar por la madera en muchas formas debido a la variedad de texturas, colores y tratamientos que existen. La madera maciza, por ejemplo, aportará un estilo rústico a la habitación, mientras que las maderas de colores claros pueden aportar luminosidad. Además, la madera es un material que se puede modificar con mucha comodidad. La madera reciclada, por ejemplo, es una tendencia hoy en día.

Cabeceros textiles

Los cabeceros textiles también aportan mucha calidez y comodidad a la habitación. Podemos escoger tanto un cabecero tapizado como un tapiz. Los tapizados tienen una estructura sólida y los tapices no necesitan una estructura sólida, ya que se cuelgan en la pared. Es muy frecuente el uso de cabeceros capitoné, un mueble con un estilo muy clásico, sofisticado y elegante. Los cabeceros de cama de metal son también una opción muy especial, ya que aportan un estilo muy diferente. Lo más habitual es ver cabeceros de metal en camas infantiles, sin embargo, también hemos visto otros cabeceros que cubren la pared de la cama con metal o aluminio. Con esta lámina de metal podemos cubrir toda la pared de la cama (una opción muy interesante) o solamente parte de esta pared.

Otras opciones

Además de estas opciones tan clásicas y típicas, también podemos encontrar los cabeceros originales, es decir, aquellos que están hechas pensando en un proyecto artístico y creativo. Suelen ser opciones muy baratas y casi siempre artesanales, hechas de una pintura de un color distinto, adhesivos y otros tipos de materiales. Podemos enmarcar la cama con un cabecero geométrico, con dibujos e incluso una pintura.